El comercio de obsidiana en Alberta
Redes indígenas antes del contacto europeo
Investigaciones recientes sobre artefactos de obsidiana en Alberta, una provincia ubicada en el oeste de Canadá, han revelado evidencia significativa de una compleja red de comercio a larga distancia entre los pueblos indígenas antes del contacto europeo. Estos hallazgos aportan nueva información sobre las interacciones sociales y económicas en la región, mostrando que las comunidades estaban conectadas a través de rutas comerciales bien establecidas.
En una declaración a CBC, el arqueólogo Timothy Allan, autor del informe y miembro de Ember Archaeology, una firma de consultoría en arqueología y recursos históricos con sede en Sherwood Park, Alberta, explicó: "La magnitud del comercio de obsidiana sugiere que probablemente millones de personas estaban en contacto entre sí". Este dato resalta la importancia de la obsidiana no solo como material para herramientas, sino también como un bien valioso en los intercambios entre distintas culturas.
El estudio analizó muestras de obsidiana provenientes de 285 sitios arqueológicos en las laderas orientales de Alberta. Se determinó que la mayor parte de los artefactos tenían su origen en Bear Gulch (Idaho), Obsidian Cliff (Wyoming) y dos fuentes en Columbia Británica: Anahim Peak y el monte Edziza. Sorprendentemente, el 61.8% de las muestras correspondía a obsidiana de Bear Gulch, lo que indica una marcada preferencia por este recurso entre los pueblos indígenas.
Exite una correlación
Uno de los aspectos más reveladores del estudio es la conexión entre la distribución de la obsidiana y las prácticas de caza comunal de bisontes, especialmente en el sur de las laderas orientales de Alberta. La obsidiana no solo era utilizada para fabricar herramientas de caza, sino que también desempeñaba un papel fundamental en las redes comerciales que vinculaban a comunidades lejanas a través de rutas fluviales y terrestres.
Los sitios de caza de bisontes, donde grandes manadas eran conducidas hacia acantilados para su captura masiva, parecen haber funcionado también como centros de intercambio. Casi la mitad de los yacimientos con presencia de obsidiana de Bear Gulch estaban ubicados a menos de 10 kilómetros de un sitio de caza, lo que sugiere que estos lugares no solo servían para la obtención de alimento, sino también como puntos de distribución de bienes comerciales.
La investigación también reveló diferencias notables en la disponibilidad de obsidiana según su origen geográfico. Mientras que la aobsidiana de fuentes del sur era hallada en grandes cantidades, las del norte eran menos comunes y se encontraban en pequeños conjuntos líticos dispersos. Esta disparidad sugiere variaciones significativas en las rutas comerciales y en la accesibilidad de ciertos recursos, lo que podría estar relacionado con factores ambientales, políticos o culturales que influyeron en el comercio.
Tecnología y análisis de la obsidiana
Para comprender mejor la distribución y procedencia de la obsidiana, los investigadores utilizaron diferentes metodologías de análisis. Se examinaron artefactos de distintos tamaños en el Royal Alberta Museum, utilizando tecnología de fluorescencia de rayos X (XRF), que permite determinar la composición química de las muestras sin necesidad de destruirlas. Estas técnicas han permitido rastrear con mayor precisión el movimiento de la obsidiana a través de la región, facilitando una reconstrucción más detallada de las rutas comerciales precolombinas.
El análisis también mostró cómo los pueblos indígenas seleccionaban y trabajaban la obsidiana de manera estratégica, produciendo herramientas especializadas para diferentes usos. La preferencia por ciertas fuentes de obsidiana podría estar vinculada a la calidad del material o a alianzas comerciales establecidas entre grupos.
Este estudio no solo amplía nuestro conocimiento sobre las estructuras económicas y sociales de los pueblos indígenas antes del contacto europeo, sino que también subraya el papel fundamental de la obsidiana como un bien de intercambio que fortalecía los lazos entre comunidades diversas. La presencia de estos artefactos en un área tan extensa demuestra que existía una red comercial bien organizada, capaz de conectar regiones separadas por cientos de kilómetros.
A medida que avanza la investigación, los arqueólogos buscan ampliar el análisis de los hallazgos de obsidiana para comprender mejor la dinámica del comercio precolombino en Alberta. La implementación de tecnologías avanzadas, como los analizadores portátiles de XRF, permitirá estudios más detallados y contribuirá a reconstruir la historia de las interacciones indígenas en la región.
En definitiva, esta investigación proporciona una visión más profunda de las redes de comercio precolombinas y refuerza la importancia de la obsidiana no solo como un material práctico, sino como un elemento clave en la organización económica y social de los pueblos indígenas de Norteamérica.
Imagen de portada: Proyecto de obsidiana de Alberta.



